Beneficios de las conservas de pescado

Las conservas de pescado tienen muchos beneficios y propiedades para nuestra salud. La marca Frinsa ofrece conservas tanto de pescado azul (atún, bonito, sardinas, caballa…) como de pescado blanco (bacalao, merluza). Pero ¿cuáles son estas propiedades? y ¿sus beneficios?

Antes de nada, un poco de la interesantísima historia de las conservas:

En Galicia el pescado se preservaba en salazón o bien en ahumado, como era tradicional en toda Europa, salvo en Francia, donde tras un concurso publicado por Napoleón a principios del siglo XIX para averiguar nuevos métodos de conservación de alimentos para su ejército, en 1811, Nicolás Appert dio con la clave para ello, cociendo los alimentos y cerrándolos herméticamente en recipientes y sin necesidad de conservantes añadidos.

No fue hasta que en 1840 un barco francés se hunde frente a Finisterre, cuando en Galicia se descubre este nuevo método, que vino para quedarse hasta nuestros días con el nacimiento de numerosas fábricas.

Elección del pescado

El primer paso para la elaboración de las conservas es la clasificación de los tipos de pescado y la selección de la mejor materia prima.

¿Cuáles son las propiedades de las conservas de pescado?

Tanto las conservas de pescado azul como las de pescado blanco son ricas en ácidos grasos de Omega 3.

Y en minerales como el potasio y el fósforo.

¿Beneficios?

Los ácidos grasos Omega 3 tienen efecto antiinflamatorio e hipolipemiante, es decir, regulan la actividad del colesterol y contribuye a evitar que éste se acumule en las arterias y pueda desembocar en enfermedades cardiovasculares.

El potasio y el fósforo ayudan al correcto funcionamiento y desarrollo del cerebro y el sistema nervioso.

 

Aceite de oliva para potenciar los beneficios

Frinsa trabaja en la fabricación de conservas de la más alta calidad, empleando materias primas naturales y coberturas que potencian el sabor y las propiedades nutricionales del producto manteniendo su compromiso con la salud, la seguridad alimentaria y la prevención de enfermedades.

En este sentido, las conservas de Frinsa emplean, principalmente, aceite de oliva como líquido de cobertura, lo cual, además de potenciar su sabor, le otorga mayores beneficios.