La Alianza Europea de Pesca de Fondo (EBFA, por sus siglas en inglés), se reunió con el Comisario de Asuntos Marítimos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, para alertar y presentar las consecuencias de la decisión comunitaria que establece el cierre de zonas de pesca en 87 áreas del Atlántico.

La EBFA, que representa a más de 20.000 pescadores y 7.000 buques europeos, también planteó las cuestiones del principio de proporcionalidad, la baja calidad jurídica del Reglamento propuesto, así como la falta de una consulta real con las partes interesadas y la falta de los mejores datos científicos para respaldar partes del nuevo Reglamento.

Una medida contraria al principio de proporcionalidad

Si bien la EBFA apoya la protección de los ecosistemas marinos vulnerables, consideran que la Comisión ha prohibido la pesca en un área total tres veces mayor de lo necesario. De este modo, para proteger 5.237 km² de EMV (ecosistemas marinos vulnerables), el ejecutivo comunitario ha prohibido la pesca en 16.419 km². Esta falta de proporcionalidad es particularmente preocupante para el sector y significa un mayor cierre de las zonas marinas sin necesidad de protección.

Una amenaza para la soberanía y la seguridad alimentaria europeas

La pesca de fondo es un contribuyente importante a la soberanía alimentaria europea: representa más de un millón de toneladas de pescado capturadas cada año, es decir, el 25% de las capturas totales a escala europea. Mientras que la UE ya importa más del 70% del pescado que consumen cada año los ciudadanos europeos, desde EBFA se muestra sorprendidos de que la Comisión refuerce esta dependencia “a través de una regulación desproporcionada”.

Falta de análisis del impacto socioeconómico

Para la Alianza Europea de Pesca de Fondo “resulta chocante que la Comisión Europea se niegue a estudiar las consecuencias económicas y sociales de tal decisión, que pone en peligro el futuro de la pesca de fondo en el Atlántico y, por lo tanto, amenaza a más de 10.000 pescadores”.

Además, desde la EBFA aseguran que la Comisión no ha consultado a los organismos europeos competentes (el Comité Científico Técnico y Económico de Pesca (CCTEP) en este caso), ni ha realizado ningún estudio de impacto socioeconómico que sea contrario a la normativa europea e incluso a los Tratados, lo que plantea una amenaza en cuanto a la legalidad de la medida.

Iván López, presidente de EBFA, reaccionó a la reunión: "Agradecemos la oportunidad ofrecida por el Comisario para reunirse y debatir este tema crucial en persona. También apreciamos el compromiso de mejorar el proceso de consulta y la ciencia subyacente en los procesos futuros. Para EBFA, fue útil exponer claramente el temor del sector y exponer las deficiencias y consecuencias negativas del acto de aplicación de la CE. Hemos solicitado, una vez más, al Comisario Sinkevicius que suspenda esta medida hasta que estén disponibles nuevos estudios científicos y de evaluación de impacto".

López continuó diciendo que “el sector no discute la necesidad de protección de los EMV. Sin embargo, la UE no puede permitirse desperdiciar el espacio marino reservado a la pesca”. “Podríamos entender el cierre de 5.237 km² de áreas ecosistémicas realmente vulnerables, pero no podemos aceptar, ni entender, el cierre total de más de 16.400 km² sin razón aparente", concluyó.

Sobre la EBFA

La Alianza Europea de Pesca de Fondo es una coalición del sector pesquero que representa a más de 20.000 pescadores y 7.000 buques, que van desde la pesca artesanal hasta la pesca de fondo a gran escala en todas las aguas de la UE, costeras y más alejadas y en aguas de terceros países, que se han unido para defender, apoyar y mostrar las realidades ambientales, económicas, sociales y culturales de los artes de fondo activos que operan en los países pesqueros de la Unión Europea.