Tras visitar Murcia y Castilla La-Mancha, continuamos con nuestra serie de entrevistas a los consejeros autonómicos, para poder conocer su valoración y sus reivindicaciones de cara a la Estrategia Nacional de Alimentación en la que trabaja el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

Es el turno de Navarra y del consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, José María Aierdi:

Definir una estrategia para el conjunto del Estado, con la participación del Ministerio y comunidades autónomas, me parece muy buena opción, porque aunque en algunas cuestiones la realidad en cada una de las comunidades es diferente, también coinciden nuestros problemas en la mayoría de CC AA. Además, hacer esta reflexión conjunta me parece muy oportuno porque se trata de un sector que tiene mucho que ver con el mundo rural, con la realidad de la actividad ambiental, económica, etc. y en un entorno cada vez más complicado, como hemos vivido a principios de año con las movilizaciones realizadas por el sector. Estamos convencidos de que la única forma de solventarlo es cambiando las reglas del juego, y por eso estamos tramitando, mi Departamento junto con el de Cohesión Territorial, una nueva ley de lucha contra el despoblamiento y de desarrollo rural.

Somos una comunidad pequeña, con una población de 670.000 habitantes, y el 50 % de esa población está en Pamplona y la comarca, con una segunda población importante que es Tudela y las poblaciones del entorno de la Ribera, pero también hay muchísima población de menos de 500 habitantes donde el sector agrícola y ganadero tiene una gran importancia. Tenemos que hacer que ese sector de la población, que es fundamental para preservar la biodiversidad y afrontar los retos que supone el cambio climático, efectivamente lo pueda hacer, disponiendo de servicios, pero también disponiendo de una viabilidad y una rentabilidad desde el punto de vista económico.

Respecto a la sostenibilidad, estamos encontrando mucho interés por la agricultura regenerativa y hemos organizado varias jornadas sobre este tema, puesto que tenemos que buscar modelos de producción resilientes y que nos permitan utilizar menos fertilizantes.

Por lo que se refiere a las mujeres, representan el 34 % de nuestras explotaciones agrícolas y ganaderas, por lo que tenemos que seguir trabajando en su incorporación al sector. En este sentido, en las solicitudes de ayudas hay una discriminación positiva para aquellas realizadas por mujeres. Es muy importante atraer al sector a gente de fuera del propio sector, si queremos que efectivamente se produzca un relevo efectivo y sostenible en el tiempo. También es fundamental que las mujeres asuman un papel mayor en las explotaciones que el que tiene en estos momentos, y ocurre lo mismo en el caso de los jóvenes. En Navarra los jóvenes representan el 18 % de los titulares de las explotaciones.

A nivel europeo, las nuevas normativas y exigencias medioambientales deben ir acompañadas de un nivel de financiación suficiente y al margen de las políticas anteriores para que los agricultores puedan ponerlas en marcha. De cara a cuando finalice esta PAC, en 2027, tenemos que establecer una política de la PAC pensada para los agricultores y ganaderos que trabajan en explotaciones familiares y no utilizar esos recursos para tapar problemas que se generaron anteriormente. Esos derechos históricos que actualmente siguen manteniéndose como modelo de distribución de los recursos son un problema para que el sector sea atractivo para la incorporación de jóvenes y de gente que sea de fuera del sector.