^{Aitor Argote}

^{Director General de Mercabilbao}

Los “mercas” jugamos un papel crucial en la cadena alimentaria, actuando como puentes entre productores y distribuidores, a la vez de asegurar el acceso a alimentos frescos en pueblos y ciudades, fomentando la competencia y la formación del precio de manera transparente. Ahora bien, en este contexto global marcado por un clima cambiante, la digitalización, la logística y los cambios en los hábitos de consumo, entre otros, enfrentamos importantes desafíos. Siendo Mercabilbao uno de los principales mercados del Estado, no somos ajenos a estos retos, teniendo en marcha distintas iniciativas para adaptarnos a las nuevas realidades, si bien y en paralelo, avanzamos en el proyecto “Mercabilbao next” para estudiar la viabilidad de trasladarnos a un nuevo emplazamiento, desde el que podamos innovar para satisfacer las nuevas demandas del mercado. Algunos de estos retos se repasan a continuación.

La sostenibilidad y cambio climático. En Mercabilbao promovemos prácticas para reducir los desperdicios alimentarios, bien mediante la donación al Banco de Alimentos, bien mediante su utilización para la obtención de harinas para alimentación animal. Asimismo, procedemos a la separación, reciclaje y valorización de los residuos y a la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones.

El avance de la digitalización de la vida y la economía ha cambiado el modo en que nos relacionamos, incluso la forma en que los productos se comercializan. Los mercados centrales, así como las empresas operadoras en los mismos, a la cabeza, estamos obligados a modernizar nuestras infraestructuras y procesos para hacer frente a la inmediatez de una demanda eficiente y trazable. Además, la integración de herramientas electrónicas es esencial para la puesta en funcionamiento de plataformas digitales que permitan a los mayoristas y minoristas gestionar sus compras y ventas de manera más eficiente. Debemos ser capaces de romper paradigmas del pasado si queremos avanzar, en un mundo más volátil.

Los cambios en los hábitos de consumo es otro reto que debemos afrontar con un cariño especial, puesto que cada vez se demandan más productos frescos, sostenibles y de origen local, lo mismo que productos en IV y V gama.

Progresivamente, nuestras empresas operadoras van adaptándose a estas tendencias para cumplir con las expectativas de los consumidores, pero a su vez, debemos tener la vista puesta en la competencia de grandes plataformas y cadenas de distribución, puesto que ejercen una presión importante sobre los mercados y el comercio tradicional, ya que pueden ofrecer precios asequibles y tiempos de entrega más rápidos gracias a su volumen y capacidad tecnológica. Por esto, debemos buscar la diferenciación destacando la frescura y calidad de nuestros productos y promoviendo la proximidad y el apoyo a la economía local, como siempre lo hemos hecho, “innovando para no tener que cambiar”.

Fundamental para competir en un entorno cada vez más exigente es la mejora de las infraestructuras y por ello en Mercabilbao concedemos especial importancia a la renovación de las instalaciones. Sin embargo, es aquí donde “nos aprieta el zapato”, porque no tenemos capacidad física de crecimiento en nuestra actual ubicación, ni siquiera para reorganizar actividades. Con este objetivo, estamos trabajando en el complejo proyecto Mercabilbao next, contemplando lo que debería ser el Hub alimentario del País Vasco, que debe aprovechar las sinergias de concentración de buena parte del ecosistema agroalimentario vasco, a la vez de servir de nodo estratégico al Corredor del Eje Atlántico Norte para la recepción y expedición de mercancías, sumando las autopistas ferroviarias a las marítimas y las carreteras para asegurar una distribución rápida y eficiente de grandes volúmenes de mercancía por Europa. Esta es nuestra visión, “ver para crecer”.