El proyecto Food-scalEUp, liderado por el Clúster Alimentario de Galicia (Clusaga), ha concluido con la celebración de su evento de cierre en los Synergy Days 2024. Este evento, organizado por SmartAgriHubs los días 14 y 15 de octubre en Barcelona, reunió a actores relevantes del sector agroalimentario de Europa, proporcionando una plataforma para que Food-scalEUp compartiera ideas clave, metodologías y resultados de acciones piloto colaborativas centradas en el avance de los servicios de aceleración para startups y pymes en el sector alimentario.

Reforzar la innovación agroalimentaria en las regiones emergentes de Europa

El objetivo del proyecto Food-scalEUp ha sido desarrollar nuevos servicios de aceleración para pymes y startups y facilitar el intercambio de conocimiento y buenas prácticas entre aceleradoras, especialmente para aprovechar las oportunidades que las tecnologías digitales brindan al sector alimentario. Cinco regiones piloto (Galicia, Navarra, Normandía, Países del Loira y Transdanubia Central) sirvieron como campos de pruebas para testar nuevas metodologías de aceleración, creadas conjuntamente con socios locales para enfrentar desafíos regionales específicos.

Los emocionantes resultados de estos proyectos piloto se presentaron durante una dinámica mesa redonda en Synergy Days, donde los representantes de cada región piloto compartieron perspectivas, desafíos y éxitos únicos, destacando las mejores prácticas para apoyar a las empresas emergentes y escalar los servicios para satisfacer las necesidades locales y europeas.

Noelia Dosil, coordinadora del Área de Innovación, Transformación Digital y Emprendimiento de Clusaga, presentó las lecciones y resultados clave extraídos del proyecto Food-scalEUp durante su intervención en el evento. Subrayó la importancia de mantener la flexibilidad en los programas de aceleración para responder a las necesidades cambiantes de las startups y pymes. Entre las mejoras realizadas, destacó avances en aspectos metodológicos y en la visibilidad y acceso a inversores, identificando además oportunidades para seguir perfeccionando los servicios ofrecidos.

Aprovechando esta plataforma, Dosil presentó el programa Business Factory Food (BFFood), una aceleradora público-privada promovida por la Xunta de Galicia en colaboración con Clusaga y un grupo de empresas tractoras del sector alimentario. Como Responsable del programa, explicó cómo BFFood apoya a las startups con servicios como financiación, mentoring, coaching y formación, entre otros. Asimismo, destacó que el piloto desarrollado en el marco de Food-scalEUp permitió implementar mejoras en BFFood, reforzando su capacidad para conectar startups con inversores y optimizar los servicios de aceleración.

Este enfoque permitió no solo destacar los resultados del proyecto europeo, sino también posicionar el programa BFFood como un modelo de referencia que adapta sus metodologías para potenciar el crecimiento de startups alimentarias.

Vincular startups con medianas empresas y corporaciones para un mayor impacto

El proyecto Food-scalEUp puso de manifiesto el importante valor de conectar a las startups con las medianas empresas y corporaciones, lo que genera beneficios mutuos: las startups ganan visibilidad y financiación, mientras que las empresas más grandes acceden a información y oportunidades de inversión. "Estamos redefiniendo el apoyo conectando a las startups directamente con los líderes de la industria", explicó Olga Romero, de CEIN (Navarra).

Mathieu Le Gac, de Startup Palace (Francia), añadió: "En el sector de la alimentación, la regulación y las complejidades del mercado significan que el apoyo no puede terminar simplemente con un partido. Es un viaje que requiere una inversión continua".

Construcción de un centro conectado para la competitividad global

La mesa redonda también expuso una visión convincente de cómo se pueden mantener y ampliar los logros de Food-scalEUp tras la conclusión del proyecto. Una de las ideas clave para la explotación futura es la creación de un "centro conectado" para ayudar a las empresas emergentes europeas a acceder a los mercados internacionales, un paso esencial, pero a menudo difícil para las regiones emergentes. "Para los jugadores más pequeños, llegar a los mercados globales es un obstáculo importante. Un centro de apoyo bien estructurado a nivel europeo podría proporcionar una infraestructura crucial y abrir nuevas puertas", expuso Romero.

Este concepto representa una oportunidad significativa para aprovechar la red y los conocimientos de Food-scalEUp, creando un ecosistema duradero de apoyo a través de las fronteras.

Mirando hacia el futuro: el legado de Food-scalEUp y las oportunidades para un mayor impacto

Para continuar aprovechando el impulso de Food-scalEUp, los panelistas describieron tres prioridades estratégicas para el legado del proyecto:

1.- Fortalecer la colaboración interregional: Ákos Szépvölgyi, de Central Transdanubian Regional Innovation Agency (Hungría), subrayó la importancia de mantener y mejorar las redes de colaboración entre regiones, asegurando que las estructuras creadas por Food-scalEUp continúen fomentando la innovación y el intercambio de conocimientos.

2.- Establecer metodologías replicables: La representante de CEIN enfatizó la necesidad de formalizar los conocimientos de Food-scalEUp en una metodología que otras regiones puedan adoptar, convirtiendo los enfoques del proyecto en un modelo escalable para futuras iniciativas de aceleración.

3.- Construir redes internacionales a largo plazo: Noelia Dosil, de Clusaga (Galicia), destacó el potencial de las conexiones transfronterizas sostenidas entre las startups, apoyando el crecimiento y la colaboración en toda Europa incluso después de que finalice el proyecto.

Clusaga y los demás socios del proyecto Food-scalEUp continuarán trabajando para fortalecer la competitividad del sector alimentario en sus respectivas regiones y en Europa, garantizando que las startups y pymes alimentarias sigan beneficiándose de un ecosistema más interconectado y resiliente.