Yago Sierras
Cofundador y CEO de Mediterranean Algae Technologies
Siempre que se habla de los alimentos que cobrarán un mayor impulso en los próximos años se incluye a las algas, tanto por sus propiedades nutricionales (son ricas en proteínas, vitaminas y Omega-3) como por sus beneficios a nivel medioambiental (son capaces de capturar el CO2 de la atmósfera, por lo que contribuyen a mitigar el cambio climático).
Mediterranean Algae Technologies es una start-up biotecnológica que se dedica al cultivo en tierra firme de algas autóctonas como método de producción sostenible, y a la extracción de principios activos de estas especies mediterráneas.
Nuestro origen está en un viaje que hice a Asia, cuando descubrí la infinidad de oportunidades en diversos sectores que tiene la aplicación de algas. A esto se sumó el efecto positivo que tuvo sobre el planeta la baja actividad humana durante el confinamiento: la contaminación se redujo, los animales recuperaron la libertad y los ecosistemas marinos volvieron a estar repletos de vida. Junto con tres amigos, nos dimos cuenta de que esta realidad también se producía en las costas alicantinas. Decidimos aprovechar el potencial de la costa y en 2021 pusimos en marcha Mediterranean Algae.
Nuestro objetivo es convertirnos dentro de cinco años en el principal productor europeo de macroalgas mediterráneas para la industria de la alimentación humana y la cosmética natural. Para ello, tenemos previsto inaugurar en abril una planta industrial de extracción en Alicante, desde donde podremos industrializar nuestros procesos productivos y llegar al mercado internacional.
Aunque nuestra idea inicial era cultivar las algas en el propio mar, a día de hoy no es viable. Nuestro Mediterráneo tiene cada vez menos vida debido a los contaminantes, y los nutrientes se están agotando. Por este motivo, decidimos desarrollar un innovador sistema que nos permitiera cultivar las algas, de manera sostenible y eficiente, fuera del mar y manteniendo condiciones similares a las marinas. Cultivar las algas fuera del mar, simulando condiciones marinas pero en ambientes controlados, nos permite proporcionar al alga las condiciones idóneas para un rápido crecimiento, y de esta forma estandarizamos una biomasa de alta calidad para la industria alimentaria.
El cultivo de las macroalgas en mar abierto, o recogidas del arribazón de nuestras costas, que eran los métodos empleados tradicionalmente, propicia el agotamiento de los recursos naturales, y además con estos sistemas desconocemos la calidad de las algas, puesto que no se sabe en qué condiciones acuáticas han crecido, y es imposible conocer si contienen o no metales pesados. Nosotros eliminamos estos problemas, ya que controlamos el proceso de crecimiento al 100%.
Como decía al inicio, con el crecimiento de nuestras algas logramos capturar y mitigar grandes emisiones de CO2. Además, pronto estará disponible para las grandes empresas que emiten cantidades elevadas de CO2 la compra de créditos de carbono azul: entonces nuestra tecnología tendrá un doble papel.
Productos para un mercado internacional
Desde nuestra creación, hemos estado centrados en sacarle el máximo rendimiento a este superproducto, tanto para el sector cosmético y farmacéutico como para el sector alimentario.
En cuanto a la alimentación, las algas van a jugar un papel clave de cara al futuro, porque son la combinación perfecta entre un alimento con muchas propiedades y un cultivo sostenible. Las algas son consideradas como superalimentos. En concreto, la lechuga de mar que cultivamos nosotros tiene más de un 20% de proteína, Omega-3, calcio, hierro, y vitaminas de distintos tipos.
Elaboramos dos productos: lechuga de mar fresca en sal y lechuga de mar deshidratada en copos o en polvo, que ya se utilizan en restaurantes gourmet de Alicante, como por ejemplo Rice&Bones, Dársena, La Marmita Alicantina, Frenezy o Wasamole, entre otros. Nuestro objetivo es tener presencia en más de 200 restaurantes antes del próximo verano. Hemos estado trabajando con restaurantes y chefs porque queríamos estar seguros de que es un ingrediente que gusta al consumidor y es versátil. Como el consumo de algas está muy relacionado con la comida asiática, en la mayoría de restaurantes que trabajamos, o los sazonadores que tenemos para el hogar, enfocamos el ingrediente como “un nuevo ingrediente de la dieta Mediterránea”. Nuestra lechuga de mar es ideal para espolvorear platos y darles un sabor a mar y un toque delicioso.
Además, ya estamos buscando otras vías para llevar nuestra innovación hasta el gran consumo. Tras ampliar nuestras instalaciones, estamos preparados para aumentar nuestra producción y estamos buscando empresas que quieran incorporar este nuevo ingrediente. Ya estamos realizando algunos proyectos en cooperación con corporates de la industria alimentaria.
No sólo nos quedamos en la fase de cultivo, proporcionando la biomasa “en crudo”, sino que nuestras instalaciones y nuestro equipo de biotecnólogos está trabajando para dar todavía mayor valor a estas algas, creando extractos de algas para su aplicación industrial, por ejemplo, potenciando proteínas, Omega-3 o gelificaciones. En adelante también tenemos previsto empezar a cultivar algas que a día de hoy son grandes desconocidas.
Cabe destacar que en 2022 ganamos el Certamen Nacional de Jóvenes Emprendedores, y recientemente fuimos finalistas en un evento europeo sobre Economía Azul, donde competían las start-ups más prometedoras de Europa, en la categoría Food & Feed. Asimismo, a finales de 2022 logramos el apoyo del club de inversión Vincle Capital, que lideró la ronda de financiación lanzada. Esto ha supuesto un punto de inflexión para que otros inversores profesionales confíen en nuestro proyecto.
La creación de Vincle Capital está promovida por el Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández (PCUMH), que también ocupa la Secretaría Técnica, y el Parque Científico de Alicante. Participan, además, empresarios e instituciones del territorio nacional, principalmente de Alicante y Murcia. Su objetivo es generar cultura de inversión en proyectos innovadores e invertibles y apoyar el ecosistema emprendedor de la zona, aunque pueden inscribirse start-ups de otras áreas.