^{Jordi Montfort, secretario general Avianza}

Hacer balance de año y marcar propósitos para el nuevo es obligado en estas fechas, pero más allá de los hitos concretos o de las propuestas generales, creo que este año debería llevar marcado el lema “trabajar juntos”. Y es que cerramos el 2021 con la sensación de tener que volver a justificar nuestra aportación como sector económico esencial para nuestro país, en vez de sentirnos parte de un mismo reto común.

Cuando el interés principal debería ser ese “trabajar juntos” para consolidar a nuestro país como referente agro-ganadero innovador, sostenible y generador de riqueza, volvemos a dejar de lado el esfuerzo realizado por miles de familias en este país, que han hecho de la avicultura y el resto de sectores no sólo una forma de vida sino también un motor de transformación y progreso. Así que vamos a quedarnos con esa propuesta de suma positiva.

A lo largo de 2021 veníamos experimentando una progresiva recuperación de la demanda, en línea con la reactivación económica, sobre todo con el impulso del sector hostelero y de la restauración, que a la postre representan el 25% de la demanda del sector avícola. Buenas noticias por un lado, aunque por otro seguimos sometidos a las potenciales olas de contagios y sus consecuencias. Queremos aspirar a esa situación de normalidad deseada, porque ese escenario contribuirá positivamente a millones de trabajadores y familias de muchos sectores. Y eso implica también “trabajar juntos”, o mejor dicho, “cuidarnos juntos”.

Porque con las olas, vienen las ondas expansivas, que en el segundo semestre han estado marcadas por la tensión en la evolución de precios de materias primas para piensos, inflación y la crisis generada por la escalada del coste de energía eléctrica. Como anunciamos en verano, esto podría suponer un incremento de costes de más de 87 millones de euros al año para todo el sector. En resumen, una factura adicional para el sector avícola español que superaría los 300 millones de euros. Por eso deberíamos buscar medidas para atajar esta situación cuando antes, de nuevo, trabajando juntos, siendo corresponsables, solidarios, justos, pues no puede ser que de nuevo los granjeros y empresas avícolas sean los únicos que absorban esa descomunal factura.

En juego está la competitividad del sector avícola y miles de empresas vinculadas a él, así como la consolidación de un proceso de transformación e inversión en modernización de toda la cadena de valor, que no puede ser castigada de nuevo o presionada para moverse hacia una fratricida pelea en forma de guerra de precios o respuesta a los productos low cost que vienen de otros mercados internacionales. Mantengamos la calidad y garantías “made in Spain” siendo respetuosos con el trabajo de nuestras empresas.

Un esfuerzo que nos ha llevado en 2021 a alcanzar varios hitos en áreas tan diversas como la sostenibilidad, la internacionalización o la innovación del sector.

En sostenibilidad anunciamos en la Cumbre sobre el Cambio Climático COP26 cómo el sector ganadero-cárnico está trabajando de manera coordinada para reducir en un 30% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) atribuibles a su actividad.

En cuanto a la internacionalización, hemos puesto en marcha conjuntamente con el ICEX un plan sectorial para llevar productos de calidad a Emiratos Árabes Unidos, además de nuestras misiones a mercados como Japón o Hong Kong, entre otros. Esto se suma a los planes existentes de comercialización en países como China, México o Filipinas, que esperamos se vayan ampliando durante este 2022, donde el papel de Avianza es, sin duda, crear herramientas y relaciones necesarias para potenciar esta expansión.

Por último, es imprescindible destacar la apuesta por la innovación del sector. A pesar de los momentos complicados y llenos de incertidumbre, muchos productores están invirtiendo en sus centros de producción para adaptarlos tanto en su proceso de transformación digital como de modernización, así como en la apertura de nuevas líneas de negocio, como los productos elaborados, auténticas propuestas delicatesen. Somos un sector plenamente comprometido con estrictos protocolos de calidad y trazabilidad, con iniciativas como nuestro sello de aves de España, que verá pronto la luz.

Esto es una clara demostración de la capacidad que tiene nuestro país para fortalecer su propuesta, donde se aúna además de un buen producto, el alto nivel de los cocineros españoles y una cuidada imagen. Y todo ello sin olvidar nuestra misión prioritaria: aportar una alimentación saludable, accesible y de calidad para las personas.