Desarrollar fumígenos naturales, a partir de materias activas extraídas de extractos vegetales, para el control de poblaciones de mosca blanca (Bemisia tabaci y Trialeurodes vaporariorum) y de focos fúngicos de botrytis (Botrytis cinerea) en cultivos hortícolas desarrollados de forma intensiva bajo invernadero. Es el principal objetivo del proyecto LIFE NextFUMIGREEN, que vio la luz en diciembre. Con un presupuesto total de 2.758.921,01 de euros, subvencionado al 60% por el programa LIFE, el proyecto tendrá una duración de cuatro años y 6 meses, hasta el 31 de mayo de 2027.
Liderado por la empresa española FumiHogar, el proyecto cuenta con otros cinco socios: la Fundación para las Tecnologías auxiliares de la Agricultura (TECNOVA); la Fundación Finnova; B&B Asesores Auditores Ambientales; Comercial Quimica Masso, y BrioAgro Tech.
Los bioplaguicidas fumigantes son menos tóxicos que los convencionales. El proyecto pretende demostrar que este nuevo bioplaguicida fumigante es eficaz contra las plagas y enfermedades específicas de los cultivos de pimiento y tomate (los mayores cultivos de invernadero) y que puede utilizarse para otros patosistemas (además de la mosca blanca, se pretende demostrar su eficacia contra el trips y la tuta absoluta) y en otros países de la UE.
Life NEXTFUMIGREEN prevé asimismo otros beneficios como la mejora de la seguridad alimentaria como consecuencia de alimentos sin residuos, y efectos positivos sobre la biodiversidad y el cambio climático. Además de las acciones de demostración en condiciones de campo, el proyecto se centrará en la formación y demostración de bioplaguicidas fumigantes, contribuyendo a la profesionalización y capacitación de los agricultores. El carácter autónomo y la “dosificación lista para usar” de los bioplaguicidas fumigantes facilita el manejo y la dosificación adecuada de los plaguicidas en el cultivo, garantizando una dosis adecuada, evitando el uso de maquinaria y proporcionando un sistema seguro tanto para el medio ambiente como para la salud del aplicador. El humo es un método de dispersión en seco, que evita los efectos adversos del exceso de humedad en los cultivos (proliferación de hongos) y evita los vertidos accidentales que contaminan el suelo y las aguas subterráneas.
Este proyecto LIFE apoya la aplicación de la política química de la UE, que incluye tanto la Directiva 2009/128/CE relativa al uso sostenible de los plaguicidas, como el Reglamento REACH. También contribuye a alcanzar los objetivos de la estrategia “De la granja a la mesa” y del Séptimo Programa de Acción Medioambiental, así como de la Hoja de ruta hacia una Europa eficiente en el uso de los recursos, y apoya las medidas agroambientales de la Política Agrícola Común de la UE.