En plena era digital, cada vez son más los sectores que innovan y se adentran un poco más en ella. Un ejemplo de ello, es la restauración, que ha encontrado un nuevo modelo de negocio con el que poder llegar a más público, reduciendo costes y por tanto ampliar sus beneficios.

Se trata de marcas virtuales con las que restaurantes, ya existentes, pueden ofrecer una gama de productos mucho más amplia, incluso, ofrecer cocinas muy especializadas sin necesidad de abrir un local nuevo. Pero no solo se suman a este nuevo modelo de negocio restaurantes con espacios propios.

Muchos emprendedores ven una oportunidad perfecta para adentrarse en la restauración, sin necesidad de abrir el espacio del propio restaurante, solo una cocina en la que poder trabajar los diferentes productos que engloben las marcas con las que trabaje.

El futuro de la restauración se deja ver en esta iniciativa, y así lo ha dejado ver David Álvarez, responsable de marcas virtuales de Deliveroo en España, que ha afirmado que hay una tendencia en alza por parte del consumidor en preferir el delivery que desplazarse al restaurante.

El delivery se adentra en las marcas virtuales

Deliveroo, la plataforma de pedidos de restauración, ofrece ayuda y oportunidad a todos aquellos que se quieran sumar. Para ello, cuentan con Deliveroo Editions, supercocinas diseñadas para ofrecer a los restaurantes un espacio donde preparar sus platos en aquellas zonas en las que la marca, por si sola, no puede llegar. Y un espacio para trabajar con los múltiples nombres comerciales que pueda tener una misma cabecera.

La empresa de pedidos ha realizado un desayuno informativo para enseñar a los medios cómo se trabaja en estas supercocinas y ampliar información sobre las marcas virtuales.

Para ello, han contado con la presencia de varios casos de éxito en la implantación de estas marcas. Como son Mama Campo, restaurante especializado en comida ecológica que cuenta con dos marcas virtuales propias; Keatz, una empresa con supercocinas distribuidas por el mundo en el que agrupan hasta doce nombres comerciales; y Lopez&Lopez, que empezó como un restaurante modesto en las calles de Lavapiés y ahora cuenta con otras dos marcas.

Todas ellas han coincidido en la gran versatilidad que ofrece esta iniciativa y sus amplios beneficios. "La creación de las marcas virtuales te permite ofrecer, por ejemplo, los productos de marcas diferentes como pueden ser una pizzería y los de la cocina tradicional mediterránea, desde una mismo espacio.  Además de llegar a más consumidores, por la gran varierdad de productos que acaparas, te permite reducir el desperdicio alimentario enormemente, ya que los productos que vendes comparten la misma materia prima", ha comentado Nacho Aparicio, socio de Mama Campo

En cuanto a seguridad y calidad alimentaria también han querido dejar claro que los estándares son muy altos, incluso más que en un restaurante físico. Toda marca virtual debe contar con sus respectivas licencias para poder aparecer en web, además de que las revisiones de seguridad alimentaria son muy numerosas.

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