Por lo general, los estudios realizados para analizar los riesgos laborales a los que están expuestas las personas trabajadoras del sector pesquero se basan en investigar su impacto sobre los hombres y no existe una política preventiva específica que desglose por ambos sexos.

Las únicas medidas preventivas específicas existentes se refieren a la capacidad reproductiva o al propio estado biológico del embarazo, a pesar de que a través de la Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2014-2020, y la Estrategia Gallega 2017-2020, se recoge la importancia de promover un enfoque de género, acorde a la creciente incorporación de la mujer a la vida laboral.

En el caso del sector pesquero, los trabajos realizados sobre riesgos laborales en los buques de pesca van orientados siempre o principalmente al género masculino, predominante en estos centros de trabajo. Sin embargo, la incorporación de las mujeres a los buques de pesca, bien como tripulación o personal ajeno a la tripulación, es una realidad y hay que tenerla en cuenta a la hora de prevenir los riesgos y accidentes laborales, ya que existen riesgos que afectan de manera desigual a hombres y mujeres, debido a las propias diferencias bioquímicas, fisiológicas y anatómicas, que hasta ahora no se valoraban.

Por esa razón, FUNDAMAR pone en marcha, con el apoyo de la Xunta de Galicia, el primer “Estudio integral con enfoque de género, en la prevención de riesgos laborales y necesidades preventivas en los buques pesqueros”, teniendo en cuenta el análisis de todos los riesgos, tanto ergonómicos, como psicosociales, físicos e higiénicos, que ayude a la incorporación de la perspectiva de género en la gestión de la prevención a bordo.

Durante 2020 se han identificado, analizado y detectado los riesgos laborales en los buques de pesca, así como las necesidades preventivas, teniendo en cuenta los efectos sobre la seguridad y salud de las mujeres, dando como resultado el primer estudio de detección de necesidades preventivas con enfoque de género en los buques pesqueros.

Tras este primer análisis, y en una segunda fase, a partir de las necesidades detectadas, se determinarán una serie de medidas y recomendaciones preventivas que sean efectivas en el entorno laboral, con el fin de eliminar factores de desigualdad que hacen más vulnerable al colectivo femenino y que permitan avanzar hacia evaluaciones de riesgos cada vez más individualizadas y adaptadas al puesto de trabajo y a la persona que lo desempeña.

Infórmate aquí sobre cómo puedes suscribirte y enterarte de todo.

Quizá te interese ver estas noticias relacionadas:

Desde Bruselas: Seguridad marítima europea: de la estrategia a la acción

El sector reclama promover la actividad acuícola en los ríos españoles