Revista Alimentaria.- Para comenzar, ¿nos puede recordar qué obligaciones establece el Real Decreto de Envases y Residuos de Envases para las empresas?
Carmen Sánchez.- El Real Decreto de Envases y Residuos de Envases establece numerosas obligaciones para las empresas, que van desde el registro en el sistema de responsabilidad ampliada del productor y en el registro de productores del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico hasta, por supuesto, cumplir con los objetivos de reciclado y valorización de los residuos de envases y la correspondiente financiación de la gestión.
Estas nuevas medidas, en general, suponen un esfuerzo considerable para las compañías, por no hablar de los costes que genera en cuanto a tiempo y recursos.
Por ejemplo, deben informar sobre la cantidad de envases puestos en el mercado y, según ello, contribuir financieramente al sistema de gestión de residuos de envases. También están obligadas a implementar medidas para reducir el impacto ambiental de los envases y garantizar la trazabilidad de los datos relacionados con los envases, cantidades puestas en el mercado, lugares de generación del residuo de envase y tratamiento que recibe. A esto se añade que deben cumplir con inspecciones y auditorías, mantener una comunicación constante con las autoridades para informar sobre las operaciones de recogida y tratamiento de residuos y publicar toda la información sobre la estructura y composición del sistema de responsabilidad ampliada.
Todas estas condiciones pueden restar competitividad y foco a las empresas, por eso nace un SCRAP como Procircular, para garantizar que todas esas premisas se cumplan mientras que colaboramos para mejorar la competitividad y rentabilidad de las empresas productoras y envasadoras.
R.A.- En este contexto, ¿qué es un SCRAP?
C.S.- Un SCRAP (Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor) es una entidad encargada de gestionar de manera conjunta las obligaciones ambientales de los productores respecto a los envases y sus residuos. Facilita la recogida, tratamiento y reciclaje de los residuos y se financia por las aportaciones de las empresas adheridas. Además, asegura la trazabilidad de los residuos desde su generación hasta su tratamiento final y cumple (y por tanto hacemos que nuestros clientes cumplan) con los requisitos legales de transparencia e informes a las autoridades. Los SCRAP también promueven campañas de sensibilización y educación ambiental, contribuyendo así a la protección del medio ambiente de manera eficiente.
En el caso de Procircular, la calidad del servicio y la experiencia de nuestro equipo de expertos es nuestra seña de identidad. Esto nos permite aportar soluciones a medida y asesorar a las empresas productoras y envasadoras a lo largo de todo el proceso y la vida útil del envase desde su propio diseño.
Uno de los elementos diferenciadores de Procircular es que al pertenecer al grupo Reclay operamos a nivel internacional y podemos ser un SCRAP único para trabajar tanto en España, como en otros países europeos. Además, nuestros más de 20 años de experiencia multinacional nos han llevado a desarrollar modelos operativos eficaces y podemos ofrecer tarifas eficientes y competitivas, sin cuota de adhesión.
R.A.- PROCIRCULAR ha recibido este año la autorización para operar como SCRAP multimaterial y multienvase en España. ¿Qué significa esto?
C.S.- Procircular ha sido la primera y, por ahora, la única entidad en España que ha recibido la autorización para operar como Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) multimaterial y multienvase. Nosotros somos los primeros que tenemos capacidad para gestionar envases domésticos, comerciales e industriales en todo el territorio nacional bajo los requisitos establecidos por el nuevo marco normativo, con independencia de donde se genere el residuo y para cualquier material. A día de hoy, somos el único SCRAP que está en condiciones de garantizar a las empresas el cumplimiento de las obligaciones de la RAP para todas las categorías de envases.
Por eso decimos que, con esta autorización, Procircular ofrece un servicio de alto valor añadido que conducirá a una simplificación de las gestiones para todos nuestros clientes, quienes podrán cumplir con todos los requisitos legales a través de un único interlocutor.
Procircular quiere dar un nuevo rumbo a la economía circular en España, a través de un modelo de gestión abierto, participativo y transparente, dinamizando el mercado y promoviendo soluciones eficientes para la RAP.
R.A.- ¿El sector alimentario está concienciado de la importancia que tiene la sostenibilidad de los envases?
C.S.- Aunque la apuesta de Procircular pasa por el desarrollo de soluciones adaptadas a los diferentes clientes y sectores, es verdad que el sector alimentario requiere un trato especial, por lo que implica unas garantías añadidas de calidad y conservación que requiere el producto. Nosotros ofrecemos un modelo de gestión que cubre todo el ciclo de vida del envase, desde el ecodiseño hasta el reciclado final. De esta forma, confiamos en poder acompañar y asesorar a las empresas desde el inicio del diseño de los envases para que sean más reciclables y sostenibles, lo que mejorará la eficiencia en los procesos posteriores de recogida, selección y reciclaje. Además, nuestra experiencia internacional operando SCRAP desde hace más de 20 años, nos posiciona como el interlocutor con más experiencia y proyectos internacionales en el sector alimentario.
Procircular entra en el mercado español para impulsar las mejoras que permitan recuperar materiales que en otros países sí se están reciclando y, así, facilitamos el acceso de los productores a material reciclado de calidad, explorando nuevas oportunidades de mejora e innovación. Nosotros creemos que hay materiales que actualmente se están desaprovechando, lo cual no tiene ningún sentido medioambiental ni económico para los productores.
R.A.- ¿Qué ventajas aporta a las empresas del sector alimentario adherirse a un SCRAP?
C.S.- Adherirse a un SCRAP ofrece múltiples ventajas a las empresas del sector alimentario. En primer lugar, facilita el cumplimiento de la normativa ambiental, garantizando que las obligaciones legales relacionadas con la gestión de los envases y sus residuos se cumplen de manera eficiente. Esto reduce significativamente el riesgo de sanciones y multas.
Además, un SCRAP proporciona una solución integral y organizada para la recogida, tratamiento y reciclaje de los envases, permitiendo a las empresas centrarse en su actividad principal sin tener que preocuparse por la logística y gestión de residuos. La colaboración con un SCRAP también puede traducirse en una reducción de costos, ya que se comparten los recursos y se optimizan las operaciones de gestión de residuos, logrando economías de escala.
Otra ventaja importante es la mejora de la imagen corporativa, porque demuestra el compromiso de la empresa con la sostenibilidad y el medio ambiente, lo que puede fortalecer la reputación de la marca entre consumidores cada vez más conscientes y exigentes en términos de responsabilidad ecológica.
Y, por último, pero no menos importante, los SCRAP también proporcionan información detallada y precisa sobre la trazabilidad de los residuos, lo que facilita la elaboración de informes y la toma de decisiones estratégicas basadas en datos reales.
R.A.- ¿Qué pasos debe dar una empresa que quiera trabajar con PROCIRCULAR?
C. S.- Para que una empresa se adhiera a Procircular primero, debe identificar el tipo de envases que usa o incluso que puede llegar a usar en un futuro inmediato. La ventaja con Procircular, a diferencia de otros SCRAP es que nosotros hemos sido los primeros en estar autorizados a operar multienvases y multimateriales, así que cubrimos todo el espectro de necesidades de cualquier empresa del sector. Por supuesto, la empresa debe firmar el contrato de adhesión y proporcionar información detallada sobre los envases que pone en el mercado. A este respecto, cabe señalar que Procircular se va a encargar de simplificar y apoyar a las empresas para facilitar el trasvase de datos a nuestros sistemas, de manera que esto no les suponga ningún esfuerzo adicional.
La empresa, una vez adherida, podrá participar en el plan empresarial de prevención y ecodiseño elaborado por Procircular, en el que deberá reflejar aquellas medidas sobre las que está trabajando/explorando para reducir la cantidad e impacto de los envases que utiliza. Asimismo, dentro de nuestros servicios de consultoría, podemos analizar la reciclabilidad actual de sus envases, identificar mejoras en su diseño para hacerlos más sostenibles y apoyar con el registro de productores de producto.
R.A.- Para las empresas, resulta un desafío cumplir con las nuevas exigencias medioambientales al mismo tiempo que mantienen su competitividad. ¿Supone un coste tan elevado cumplir con la nueva regulación?
C.S.- Cumplir con la nueva regulación del Real Decreto de Envases y Residuos de Envases ciertamente puede implicar costos adicionales para las empresas, pero es importante analizar tanto los costos directos como los beneficios a largo plazo.
Si bien los costos iniciales y recurrentes pueden ser significativos, las empresas también tienen la oportunidad de obtener beneficios a largo plazo. La clave está en ver estas exigencias no solo como un costo, sino como una inversión en sostenibilidad, eficiencia y competitividad futura. Adaptarse a estas regulaciones puede fortalecer la posición de la empresa en el mercado y contribuir a un modelo de negocio más sostenible.
De hecho, hay un coste directo al adherirse a un SCRAP y luego pagar tarifas por los envases puestos en el mercado, lo que representa un costo recurrente. Pero este coste siempre será mucho menor que tener que alcanzar los objetivos de reciclaje y valorización con recursos propios, porque puede requerir inversiones en infraestructura, tecnología y procesos de gestión de residuos que son mucho más eficientes externalizar, tanto porque va a resultar más económico, como porque lo vamos a hacer mejor ya que es el corazón de nuestro negocio, y es nuestra especialidad y razón de ser.
Por no hablar de las nuevas oportunidades ya que cumplir con regulaciones ambientales estrictas puede abrir la puerta a mercados que valoran la sostenibilidad, tanto a nivel nacional como internacional. Y que la presión para cumplir con las regulaciones puede impulsar la innovación en productos y procesos, llevando a la empresa a desarrollar soluciones más eficientes y sostenibles. Procircular puede ser tu aliado estratégico en este camino.
R.A.- ¿Cómo están informando al sector de los servicios que ofrece PROCIRCULAR?
C.S.- Nos estamos centrando en mantener reuniones con los distintos grupos de interés y cerrando acuerdos bilaterales con colaboradores y clientes. Nos encontramos en una fase del proyecto en la que las relaciones institucionales son fundamentales porque queremos dar a conocer nuestras ventajas diferenciales y que pongan su confianza en Procircular. Para nosotros es importante darnos a conocer en la cercanía de un encuentro.
Por supuesto también estamos utilizando otros canales, por ejemplo, hemos llevado a cabo nuestra primera campaña con un vídeo corporativo de lanzamiento, una campaña de comunicación y una nueva web que en la actualidad ofrece a los productores toda la información y servicios que necesitan para la gestión de todos sus envases.
El concepto de esta campaña que llamamos “Completando el círculo de la economía circular” busca reforzar la idea de que hasta hoy somos el único SCRAP multimaterial y multienvase que opera en la gestión de todo el ciclo de vida del envase, lo que simplificará todas las gestiones del productor y le convierte en un socio con clara vocación de servicio ante el nuevo escenario de constantes cambios en la normativa de envases y residuos de envases.
El concepto “Completando el círculo” se usa como hashtag en todas las comunicaciones, en redes sociales y en banners de campaña para mostrar nuestro posicionamiento único y diferencial frente a otros SCRAP: “En un mundo en el que todo debería ser circular, tu empresa necesita a alguien que logre completar el círculo”.
Además, realizamos otras acciones en este sentido como banners publicitarios, webinars específicos para nuestras empresas adheridas sobre los temas de mayor interés, encuentro con medios y un evento de presentación de Procircular.
Estamos muy satisfechos con el interés que estamos despertando, son numerosísimas las empresas que se ponen en contacto cada día con nosotros y esperamos finalizar el año 2024 con alrededor de 4.000 empresas adheridas.
R.A.- ¿Hay algún aspecto que todavía quede por desarrollar a nivel legislativo?
C.S.- Es cierto que en la recogida de envases llevamos trabajando muchos años, pero es el momento de darle un impulso adicional porque las necesidades han cambiado. Ya no se trata sólo de cumplir objetivos en materia de recogida, sino que además es necesario alcanzar la circularidad del envase y para ello es necesario mejorar y aumentar el acceso a material reciclado de calidad. En sectores concretos como alimentación y bebidas se suma además un componente muy importante de seguridad alimentaria. En estos sectores el envase no es sólo un continente, sino un protector del producto.
Por otro lado, también hay que asentar, porque las empresas sienten que les han incorporado muchos nuevos requisitos en muy poco tiempo y que no se mueven en un escenario jurídico claro. Les ha llegado una legislación que les obliga a hacer muchas cosas nuevas y con unos márgenes y plazos muy ajustados. No obstante, debo decir que no veo a nadie que esté queriendo arrastrar los pies, las compañías están buscando la forma y los recursos para cumplir con los requisitos legales y precisamente nuestra área de consultoría está recibiendo muchas peticiones de apoyo para cumplir con la normativa.
R.A.- Respecto a los consumidores, PROCIRCULAR también trabaja con los residuos domésticos. ¿Qué servicios ofrece en este sentido?
C.S.- Nuestro objetivo es reciclar más tipos de envases y con más calidad, especialmente en el segmento de los plásticos, que es donde creemos que hay más recorrido en el mercado español. Consideramos que es necesario abrir el sistema de reciclaje a otros tipos de plástico, como el polipropileno. Ahora mismo, en las plantas españolas se está separando film, pet y polietileno de alta densidad, pero todos los demás materiales van a la fracción de plástico mezcla. En este proceso, se producen mermas y pérdidas en términos de calidad y de cantidad.
Por nuestra experiencia en otros países, todo lo que se puede sacar en flujos específicos en el proceso de selección, garantiza una mayor calidad del residuo. Y esto es lo que queremos hacer en España. Creemos que hay materiales que se están desaprovechando, que acaban en los vertederos y que pueden ser reciclados, lo cual no tiene ningún sentido medioambiental, ni económico, ni social. Queremos entrar en el mercado para dinamizarlo, incorporar buenas prácticas que permitan aflorar estos materiales que en otros países sí se están reciclando y mejorar así tanto la disponibilidad de materiales reciclados de calidad, como las tasas de reciclado. Los consumidores son un eslabón clave para que la cadena del reciclaje funcione, hay que ponérselo fácil, con los medios de recogida a su alcance y motivando su participación.
Señalar también que desde los SCRAP debemos contribuir a la sensibilización de los ciudadanos/consumidores para que demanden productos y envases sostenibles. Este es el mejor motor para alcanzar la circularidad de productos y envases.
También es necesario motivar a los ciudadanos que hasta ahora no seleccionan envases en sus hogares de forma habitual, ellos son la clave para mejorar las tasas de recuperación para llegar a los niveles que nos requiere la legislación. Sin duda, este será uno de los grandes retos que tendremos que afrontar los próximos años
R.A.- ¿Qué supone para PROCIRCULAR contar con el respaldo del Grupo Reclay?
C.S.- Reclay ya está operando SCRAP desde hace más de 20 años en 7 países europeos, EEUU y Canadá. Disponemos de un equipo de expertos nacionales que conocen muy bien cada mercado, las competencias, las particularidades, las diferentes legislaciones… pero a la vez analizamos qué conocimientos, innovaciones y tecnologías que se están presentando en otros países pueden servir para mejorar el sistema en España. Esto es un plus que nos diferencia y que está provocando una gran acogida entre las empresas y las administraciones locales.
Aportamos una visión internacional a la RAP de envases que aporta un doble valor añadido al mercado español.
Desde el punto de vista operativo, disponemos de la capacidad y el conocimiento para traer al mercado español soluciones que están implantadas en otros países. Y desde el punto de vista del productor, estamos en una posición inmejorable para apoyarles en el cumplimiento de la RAP en distintos mercados, lo cual es un gran beneficio para las empresas que exportan sus productos.
R.A.- De cara al segundo semestre de 2024, ¿cuáles son los objetivos de PROCIRCULAR?
C.S.- Las empresas que ponen en el mercado envases domésticos tienen de plazo para cambiar de SCRAP hasta el 30 de septiembre. Para los envases comerciales e industriales, las empresas deben estar acogidas a un SCRAP antes de que acabe el año 2024. Como somos el primer SCRAP en ser autorizado para operar envases domésticos, comerciales e industriales en todo el territorio, nuestros retos pasan por dar a conocer la propuesta de valor de Procircular en el mercado español, y que las empresas conozcan que pueden cumplir sus obligaciones a través de PROCIRCULAR, así como beneficiarse de todos nuestros servicios.
A medio plazo y, desde un punto de vista operativo, vamos a trabajar para implantar las mejoras en los procesos operativos de envases domésticos que permitan recuperar más envases y de mayor calidad, cumpliendo los objetivos de reciclado a unos costes eficientes para empresas y consumidores.
Desde Procircular consideramos que es necesario seguir trabajando para conseguir más material reciclado de alta calidad y de mayor disponibilidad para fomentar una economía circular moderna. Nuestra voluntad es trabajar en base a principios de lealtad, transparencia y colaboración con el resto de los operadores del mercado, ciudadanos, administraciones y empresas, fomentando el diálogo entre todos los agentes implicados para afrontar los nuevos desafíos que tenemos por delante en el ámbito de los envases.