“La industria alimentaria de Castilla y León ha demostrado una gran capacidad de resiliencia y de sobrevivir a las adversidades, que la ha convertido en motor de desarrollo social y económico, bastión de la España rural y seña de identidad de nuestra región”, ha señalado el presidente de la Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León, Vitartis, Pedro Ruiz Aragoneses, durante la apertura del II Congreso de la Industria Alimentaria de Castilla y León, que organiza la Asociación.

Ruiz Aragoneses subrayó que desde Vitartis se trabaja por toda la cadena alimentaria, “desde los valores y el ejemplo”. Por eso, dijo, este Congreso tiene que convertirse en el punto de encuentro y reflexión de todo el sector, donde se conciten las opiniones de empresarios, directivos, profesionales y expertos. Y se refirió a los valores fundamentales que encarna Vitartis: la innovación, que tiene su propio espacio en el Congreso, y la cultura colaborativa.

“El sector tiene que dar la cara, mostrarse esencial y trabajar con un propósito que nos hace ir más allá de la propia actividad”, señaló, en clara referencia al lema del propio Congreso, FUTURO CON PROPÓSITO. Es decir, dos  elementos fundamentales, como son el progreso y las personas, así como tres ideas transversales: sostenibilidad, competitividad y responsabilidad, que son los pilares del Plan Estratégico de Vitartis.

El acto de apertura del Congreso contó con la intervención de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; el alcalde de Valladolid, Óscar Puente; y la directora general de Industria y Cadena Agroalimentaria del Ministerio de Agricultura, María José González Garrachón.

Aumento de costes

Posteriormente tomó la palabra el director de Empresas e Instituciones de Santander España, Antonio Román, que hizo un análisis sobre las perspectivas económicas y financieras.

Román señaló los retos a los que se enfrenta el sector, tales como el aumento del coste de carburantes y el incremento que la invasión de Ucrania está produciendo en los precios de los alimentos y otras materias primas agrícolas a nivel mundial.

En este sentido, subrayó la decidida apuesta del banco por el sector agroalimentario, al que apoyó con más de 3.700 millones de euros en 2021; y al que respaldó de forma especial en la transformación digital de sus negocios y en la modernización de sus explotaciones hacia cultivos más rentables y sostenibles.

Apostar por nuevas habilidades

Por otra parte, Álvaro Merino, speaker internacional y creador del método 3’59 aplicado a empresas del IBEX 35, aseguró que el “deporte de alto rendimiento es un escenario ideal desde donde comprender las estrategias clave para responder a los grandes retos actuales para las organizaciones que son capaces de anticiparse a los entornos cambiantes”.

A ello se refirió Merino durante su ponencia ‘Liderazgo y equipo’ en la que habló sobre los nuevos escenarios BANI (quebradizos, ansiosos, no lineales e incomprensibles) que “exigen revisar nuestras habilidades y apostar claramente por el gran protagonista del cambio: el equipo”.

Merino aseguró que los equipos, las organizaciones y los negocios necesitan una revisión profunda de los modelos de liderazgo que “permitan a las personas sentirse pertenecientes a proyectos que impacten no solo en la cuenta de resultados, sino en la comunidad en la que se encuentra inmersos”.

Espacio de Innovación

Además, en paralelo se celebra el Espacio de Innovación, en el que participan 12 entidades: universidades, centros tecnológicos y empresas de base tecnológica socias de Vitartis.

Ubicado en la Feria, cada participante dispone de un stand informativo para dar a conocer sus capacidades de innovación agroalimentaria, las soluciones innovadoras que han propuesto para el sector y los proyectos de innovación que están desarrollando.

Mesa redonda sobre el Futuro de la Industria Alimentaria en Castilla y León

Todo lo que ha acontecido desde la pandemia, unido a la situación actual de guerra en Ucrania y a la crisis de los precios, está afectando claramente a las cadenas de suministro y poniendo en cuestión algunos modelos que, aun siendo muy eficientes en costes, no son capaces de garantizar la distribución al cliente en estos momentos. Por tanto, este nuevo contexto económico está obligando a las empresas agroalimentarias a ‘repensar’ sus modelos logísticos.

Así lo ha destacado el responsable de Operaciones de Mahou, Nicolás Castrejón, , donde ha destacado que en la actualidad a algunas compañías muy deslocalizadas están viéndose obligadas a acercar sus puntos de suministro, puesto que el cliente necesita respuesta en tiempo y forma; y esto, a su vez, exige agilidad, flexibilidad y solidez.

Para abordar este nuevo contexto, y los cambios y planes que exige, Mahou San Miguel apuesta por fórmulas como la colaboración público-privada, las alianzas entre empresas y el apoyo de los fondos de la UE pueden ser las claves que ayuden a impulsar este tema.

“Estamos en un momento de oportunidad, en un momento de transformación global y más en el mundo del transporte y de la logística. Es un reto muy amplio que necesita de recursos, de acuerdos entre empresas y de una colaboración con la Administración”, ha afirmado Castrejón.

Igualmente, ha defendido la necesidad de avanzar en el Corredor Atlántico de mercancías con el objetivo de que el noroeste de España adquiera un mayor protagonismo en el flujo de mercancías. En este sentido, Castilla y León jugaría un papel principal para conectar Galicia, Portugal, sur de España y vías hacia Francia.

En esta mesa sobre Logística Sostenible también han intervenido Bárbara Ferrer, responsable de Lean and Green de AECOC, y Luis Vicente Moreno, director ejecutivo de Servicios Logísticos de ADIF.
 

Sostenibilidad, retos y estrategias de futuro

En la mesa sobre Sostenibilidad y Retos del sector agroalimentario, se ha abordado el impacto del cambio climático y los esfuerzos que empresas y administraciones están llevando a cabo para tratar de mitigarlo. El director de Cambio Climático de Familia Torres, Josep María Ribas, ha explicado que cada año la compañía intensifica los esfuerzos para reducir las emisiones de CO₂ por botella en todo su alcance y conseguir el objetivo fijado para 2030 con respecto al 2008 de reducirlas en un 60% como mínimo, convirtiéndose así en una bodega de cero emisiones antes del 2040.

Además del esfuerzo de su propia adaptación encaminada a mitigar la crisis climática, esta bodega trata de influenciar a otros y conseguir sumar esfuerzos para descarbonizar la economía a nivel global.

Dos ejemplos son el grupo colaborativo International Wineries for Climate Action, cofundado en 2019 con la bodega californiana Jackson Family Wines y que ya aglutina a más de 30 bodegas de todo el mundo, y la reciente constitución de la Asociación de Viticultura Regenerativa para compartir conocimientos y experiencias en torno a este modelo vitícola que supone un cambio de paradigma en la gestión de los viñedos.

En esta Mesa también ha intervenido el director de Desarrollo de Negoico y Compras de Covap, Emilio de León, y el director general de TROPS, Enrique Colilles.

Perspectivas del sector en España

El presidente de la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), Tomás Pascual, se ha referido hoy a la necesidad de “articular medidas que permitan garantizar el funcionamiento de la cadena alimentaria y el abastecimiento de alimentos y bebidas al conjunto de la población en escenarios de inestabilidad surgidos a raíz de los actuales conflictos internacionales”.

“Nuestra industria es una de las más grandes potencias exportadoras de Europa; y nuestros productos, seguros, variados y de calidad, son embajadores de la marca España en todo el mundo”, agregó Pascual.

Por otra parte, subrayó la importancia del PERTE alimentario y la necesidad de que sea accesible para las pymes del sector e hizo un llamamiento a la “colaboración público-privada para seguir avanzando en los objetivos comunes que impulsen la recuperación económica y la creación de empleo, acompasando la legislación sobre el sector a la situación actual de incertidumbre”.

El presidente de FIAB recordó que la industria de bebidas y alimentación es el primer sector industrial del país, “locomotora de la economía española y con una fuerte implantación de la España vaciada”.

El Indo-Pacífico, en el epicentro

Por su parte, la analista del entorno geopolítico y tecnológico de China Fundadora y editora de #ChinaGeoTech, Águeda Parra, apuntó que el panorama geopolítico actual está mostrando “un mundo en transición más rápido de lo esperado”.“A las dinámicas de cambio actuales se van a ir sumando otras más ligadas con la geopolítica de la tecnología, la gran protagonista de la coyuntura internacional en las próximas dos décadas”, sostuvo.

En su opinión, con la rivalidad por el liderazgo tecnológico entre Estados Unidos y China entrando en su etapa decisiva, y la Unión Europea iniciando su camino hacia la autosuficiencia tecnológica, “el Indo-Pacífico se reivindica como el epicentro donde se van a producir los mayores desafíos económicos y de seguridad”.

“Una geopolítica en transición que plantea oportunidades y algunos desafíos, que van a requerir de una mayor vitalidad innovadora y de la apuesta por una transformación sostenible”, concluyó.

Y la capacidad de resiliencia, en riesgo

“Para optimizar la cadena de valor del sector agroalimentario es necesario que todos los eslabones trabajen desde un enfoque basado en el consumidor”, dijo Ignacio García Magarzo, director general de Asedas, durante su intervención en la mesa de análisis dedicada a cómo optimizar la cadena de valor. Tras recordar el “altísimo nivel” demostrado por el sector durante los peores momentos de la pandemia, García Magarzo aseguró que la “actual crisis multifactorial está afectando al conjunto de la cadena y pone en riesgo su capacidad de resiliencia”.

El alza generalizada de los costes y las cargas normativa y fiscal, dijo, “nos afecta a todos y es muy preocupante”.

“Para abordar las soluciones, necesitamos la ayuda de las administraciones públicas, lo que pasa por ser reconocidos como un sector esencial para garantizar el abastecimiento de productos de alimentación a la población ante cualquier circunstancia futura que se pueda presentar”, concluyó.