La Comisión Europea acaba de adoptar la Comunicación “Hacia un sector de las algas en la UE sólido y sostenible” con el objetivo de liberar todo el potencial que tienen las algas en la UE. En este documento se proponen 23 acciones para convertir esta industria en un sector sólido, sostenible y regenerativo, capaz de satisfacer la creciente demanda de la UE. Se espera que en 2030 la demanda alcance los 9.000 millones de euros, especialmente en el sector alimenticio, de cosmética, de productos farmacéuticos y de producción de energía.

Actualmente, la UE es uno de los mayores importadores de productos de algas marinas del mundo, pero con estas acciones se pretende optimizar la producción propia.

23 acciones para impulsar el sector

Las 23 acciones previstas por la Comisión incluyen mejorar los entornos empresariales, aumentar la sensibilización social y la aceptación de las algas y de los productos a base de algas por parte de los consumidores, y colmar las lagunas en materia de conocimientos, investigación y tecnología. Algunas de estas acciones son: desarrollar un nuevo conjunto de herramientas para los cultivadores de algas; facilitar el acceso al espacio marino, identificar lugares óptimos para el cultivo de algas e incluir la agricultura de algas y los usos múltiples del mar en los planes de ordenación marítima; elaborar normas para los ingredientes y los contaminantes de las algas, así como para los biocarburantes de algas, en colaboración con el Comité Europeo de Normalización (CEN); evaluar el mercado potencial, la eficiencia y la seguridad de los materiales a base de algas cuando se utilizan en productos fertilizantes; examinar el mercado de algas y proponer mecanismos que lo estimulen para apoyar la transferencia de tecnología de la investigación al mercado.

Se incluyen también acciones para financiar proyectos piloto para la reorientación profesional y el apoyo a pymes y proyectos innovadores en el sector de las algas; realizar estudios y debates para adquirir un mejor conocimiento de las oportunidades para la mitigación del cambo climático que ofrecen las algas, así como de su papel como sumideros de carbono azul, y definir unos niveles máximos de contaminantes y yodo en las algas; a través de Horizonte Europa y otros programas de investigación de la UE, apoyar el desarrollo de sistemas de transformación de algas nuevos y mejorados, nuevos métodos de producción y sistemas de cultivo de algas, y promover acciones de sensibilización y analizar la disponibilidad de datos relacionados con las algas.

Personas y organizaciones activas en el sector de las algas serán socios clave para la ejecución de las acciones propuestas. Todos los interesados están invitados a participar en el foro EU4Algae, puesto en marcha por la Comisión el pasado mes de febrero.

Próximas etapas

La Comunicación será debatida entre la Comisión, el Parlamento Europeo y el Consejo. Después, el ejecutivo comunitario coordinará la puesta en práctica de las 23 acciones junto con los Estados miembros, la industria y las demás partes interesadas.

A finales de 2027 deberá estar listo un informe elaborado por la Comisión en el que se evaluarán los progresos realizados en la aplicación de la Comunicación.

Contexto

En 2019, el Foro de Bioeconomía Azul de la Comisión Europea publicó Roadmap for the blue bioeconomy, una hoja de ruta en la que se concluyó que el desarrollo de la alguicultura se había visto obstaculizado por factores como los elevados costes de producción, la pequeña escala de la producción, el conocimiento limitado de los mercados, de las necesidades de los consumidores y de las repercusiones medioambientales del cultivo de algas, así como por un marco de gobernanza fragmentado.

Tras la hoja de ruta, la Comisión ha puesto en marcha y apoyado varias iniciativas relacionadas con las algas, que se encuentran actualmente en fase de ejecución o planificación (2021-2023). Así, en febrero de 2022, se creó el Foro Europeo de Partes Interesadas en las Algas (Foro EU4Algae) como un espacio único para la colaboración entre las partes interesadas europeas en las algas y un único centro de información sobre convocatorias de financiación, proyectos, información empresarial, inteligencia y mejores prácticas en materia de algas.

Además de las aplicaciones comerciales a las que se pueden destinar las algas, como alimentos, piensos para animales y peces, productos farmacéuticos, envasado ecológico o biocombustibles, el cultivo de microalgas puede ayudar a regenerar el océano y los mares eliminando los nutrientes que causan eutrofización; tiene una huella de carbono y medioambiental baja y un potencial prometedor para la captura de carbono. La producción de microalgas también puede realizarse en tierra y lejos del mar. Son fuente de compuestos de carbono y tienen aplicaciones en el tratamiento de aguas residuales y la mitigación del CO₂ atmosférico.

Un sector europeo de las algas más sólido reforzaría los objetivos del Pacto Verde Europeo y de la Estrategia “De la granja a la mesa”.