La innovación, como la felicidad, puede estar en la pequeñas cosas del día a día. Por ejemplo, algo tan cotidiano como una bolsa de brócoli congelado contiene la suma de un sinfín de tecnologías. Desde el campo, donde se ha investigado la variedad de esta crucífera más resistente al cambio climático; pasando por la fábrica, donde se han aplicado sensores inteligentes para maximizar la calidad; hasta llegar al consumidor en un envase con el mínimo impacto ambiental.
La innovación va más allá de una creación espectacular, disruptiva. Y no solo afecta al producto, sino que abarca a todas y cada una de la áreas de una empresa, desde recursos humanos hasta la programación de las ventas.  Sin una definición única, la innovación, en sus poliédricas facetas, debe calar en el alma de la empresa, que la percibe como necesaria para su supervivencia en un mercado tan competitivo como el agroalimentario. Estas fueron algunas de las ideas que ayer se expusieron en el ‘Desayuno Navarra Agro Foodtech’, organizado por Diario de Navarra en colaboración con Banco Santander.

Directivos de las firmas General Mills (Imanol Vidal), Grupo Virto (Eva Virto), Ingredalia (Miguel Ángel Cubero) y Eosol (Iker Gómez) , juntos en una mesa organizada por Diario de Navarra y Banco Santander. 

Responsables de cuatro empresas abordaron las claves de innovar en una mesa titulada ‘La innovación en la cadena de valor del sector agroalimentario’. Participaron Iker Gómez, director Eosol; Eva Virto, directora de Innovación Ultracongelados Virto; Miguel Ángel Cubero, director general de Ingredalia e Imanol Vidal, director general de General Mills. Estefanía Erro, directora de Innovación en el CNTA, moderó la mesa.
 
 “PERDER EL MIEDO A COLABORAR ENTRE EMPRESAS”
“¿Si la innovación tiene futuro? Si queremos ser competitivos, competir con las marcas blancas, no nos queda otro remedio que innovar”. Estas palabras son del directivo de General Mills, Imanol Vida. Su empresa se ubica en San Adrián y se dedica a la elaboración, entre otros productos, de tortillas de trigo o maíz con marcas como ‘Old el Paso’. Vidal defendió que la innovación debe ser “colaborativa”. “Tenemos que perder el miedo a colaborar con empresas que se supone somos competidoras. Y hacer pequeñas innovaciones. No esperar la gran innovación”, declaró.

El directivo lleva 20 años en la empresa, pero con anterioridad trabajó ocho años en la industria de la automoción. “Es infinitamente más complicado producir alimentos. Un tornillo, lo rectificas, y son todos iguales. Aquí la materia prima que te llega un día es completamente diferente a la de ayer, porque ha llovido o lo que sea. Está viva. En la agroindustria hay muchísima más tecnología de la que nos podemos imaginar”.

Eva Virto recordó que su padre, Javier, abrió hace 40 años almacenes de fruta y verdura fresca y, cuando decidió exportar, vio en la ultracongelación una oportunidad, una innovación, para dar respuesta a una demanda de la sociedad. Hoy, la firma cuenta con 22 centros productivos en diez países y con 2.200 empleos, casi la mitad en Navarra. “La innovación, mejorar, está en cada área de la empresa y, desde el campo hasta la mesa, hay una cantidad de tecnología impresionante”, apuntó.
Iker Gómez, de Eosol - una empresa de ingeniería con 700 empleados y que ofrece soluciones en diferentes sectores, entre ellos el agrícola- entiende la innovación “como creación de productos que ofrezcan algo nuevo a un sector”. Para este directivo, lleva su tiempo “convencer” de las bondades de una tecnología.

Miguel Ángel Cubero , de Ingredalia (una startup dedicada a transformar subproductos de brócoli en ingredientes funcionales para la salud) abogó por restar importancia a los fracasos cuando se innova. “En nuestra cultura, lamentablemente, tenemos mucho miedo al error y al fracaso. Tienes que probar y, si te equivocas, no pasa nada”, afirmó el directivo, que definió la innovación “como hacer las cosas de manera diferente”. Según Cubero, en la innovación siempre se debe escuchar al mercado. Por eso, aconsejó “salir” y ver qué se demanda porque el consumidor es soberano.
Innovar, una revolución en la que Navarra “se juega mucho”

El director general del Grupo La Información, José Manuel Erro, destacó la importancia de la innovación para el futuro del sector agroindustrial. “Nos va mucho en ello porque constituye uno de los pilares económicos de Navarra”. En la inauguración de la jornada, Erro calificó a la industria alimentaria como “sector brillante” y consideró clave que Navarra “pivote la revolución” que supone innovar en la actualidad.

El director territorial del Banco Santander de Aragón, La Rioja y Navarra, Javier Gallardo, coincidió en el carácter estratégico de agricultores, ganaderos e industrias alimentarias como “motores” de riqueza para la economía y la generación de empleo. Destacó que la financiación es una “pieza angular” a la hora de innovar. Y detalló que la entidad ha concedido en los nueve primeros meses de 2024 “más de 3.600 millones al sector, un 15% más que en el mismo periodo de un año antes.

AIERDI : "LA AGROINDUSTRIA, PRIMER CREADOR DE EMPLEO"
El consejero de Desarrollo Rural, José María Aierdi, recordó que el sector agroindustrial aporta el 5% del Producto Interior Bruto (PIB). Subrayó que es el primer subsector industrial en la generación de empleo y que, en la actualidad, representa el 10% del empleo de Navarra.

Para el titular de la cartera agraria en Navarra, la aplicación de tecnologías en los alimentos (foodtech) obliga a todo el ecosistema en torno a la alimentación a solventar nuevos desafíos en un mercado globalizado. “No podemos quedarnos parados. La aplicación de tecnologías (foodtech) es un oportunidad clave para cumplir los objetivos de futuro”, afirmó Aierdi. Entre los retos, el consejero señaló el garantizar el abastecimiento de materia prima a la industria, la capacidad de producir alimentos saludables, lograr procesos más sostenibles con el medioambiente y que, al tiempo, permitan a la empresa ser rentable y competitiva. También se refirió a conseguir que el sector agroindustrial sea “atractivo” para los jóvenes y la racionalización de recursos como el agua. En su intervención, Aierdi hizo hincapié en la expansión de la agroindustria navarra con un dato. Dijo que entre 2004 y 2023 el comercio exterior del sector navarro ha crecido un 308% “gracias a la relación entre la industria y el sector primario”.