La uva es protagonista absoluta cada 31 de diciembre. Pero es una fruta con muchísimas aplicaciones, algunas de ellas muy desconocidas, que se pueden utilizar y aprovechar durante todo el año.

Estos son algunos de los productos y compuestos más destacados que se pueden aprovechar de la uva y que encontramos gracias a especialistas como Vinumar. Y es que la uva no solo es uva, esa pequeña fruta redondeada que podemos comer en cualquier momento del día. También podemos encontrarlo en formato líquido o polvo, principalmente, gracias a la separación de ciertos de elementos que las conforman.

Extractos de piel de uva

El extracto de piel de uva, también llamado enocianina, se utilizan como colorantes 100% naturales. Estos pigmentos, que pertenecen a la familia de los polifenoles, se pueden encontrar en formato líquido o polvo y ofrecen una gama cromático del violeta al rojo oscuro.

Se pueden usar en productos de alimentación, como pasteles, zumos, lácteos, helados, mermeladas…

Extractos de vino

Los extractos de vino ofrecen mucho sabor y cuerpo a nuestras recetas y están especialmente indicados para salsas, sopas, caldos, mermeladas, carnes, bebidas sin alcohol… Estas sustancias naturales también están disponibles en formato líquido y polvo, además, tienen un gran valor gastronómico.

Taninos de uva

Los taninos de uva, por su parte, son un aditivo natural que se obtiene a través de la piel y las pepitas de la propia uva. También son un tipo de polifenol y se pueden utilizar para mejorar el propio vino, ya que su uso es principalmente enológico.

Una de sus ventajas es que tiene una acción antioxidante muy importante. 

Extractos de semilla de uva

Estos extractores de semilla de uva, también parte de los polifenoles, tienen un poder antioxidante fantástico, por lo que se puede utilizar en múltiples aplicaciones. Las más habituales son los suplementos alimenticios y las bebidas funcionales. 

Alcoholes

De la uva también se pueden extraer alcoholes, algo muy ligado a este mundillo. Según el modo en el que se han obtenido, la forma de purificación, su refinamiento o su graduación, se le pueden atribuir unas propiedades u otras.

Lo más curioso son las aplicaciones que se pueden obtener en la industria gracias a los alcoholes de la uva. Pueden usarse como biocombustibles, como desinfectante, como producto de limpieza, como perfume y por supuesto también para uso alimentario, en ciertos vinos, bebidas y licores.

Pepita de uva

Y, por último, la pepita de uva o la granilla de uva tiene un gran valor alimenticio y también un alto componente nutritivo. ¿Cómo se obtiene? A partir del secado del orujo, se separa la pepita de la propia uva, se selecciona para minimizar las impurezas y se obtiene este producto tan importante para la industria. Se puede utilizar, por ejemplo, como aceite alimentario o incluso en la industria cosmética.

La uva, esa gran desconocida

La uva es una de las más desconocidas en la industria y, como ves, sus aplicaciones pueden incluir desde el sector alimentario hasta el energético, cosmético, salud… Sus posibilidades no conocen límites.