El Ministerio de Consumo tiene previsto regular el uso del etiquetado nutricional frontal Nutriscore antes de que finalice este año 2021. Sin embargo, se trata de un sistema que tiene tanto defensores como detractores por parte de la industria y del mundo académico.

En el caso de quienes se plantean los déficits y puntos de mejora que tiene este sistema, destaca un grupo de más de cien científicos que firmaron un manifiesto en febrero en el cual mostraban su preocupación por la implantación de esta herramienta.

Este grupo de investigadores está encabezado por el profesor Francisco Pérez Jiménez, Catedrático Emérito de la Universidad de Córdoba (UCO), del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC), que en esta entrevista nos explica los diferentes puntos que generan dudas acerca de la utilidad de Nutriscore.

En primer lugar, el profesor destaca que no existe consenso por parte de los científicos acerca de este sistema, por lo que se trata de un conflicto científico que nos hace plantearnos: "¿Es legítimo y estamos siendo honestos con el consumidor si le forzamos a usar una herramienta sobre la que no hay unanimidad?".

El aspecto más importante que lleva a este desacuerdo es la falta de reconocimiento del aceite de oliva virgen como alimento saludable. Así, Nutriscore no distingue entre aceite de oliva y aceite de oliva virgen, y los califica con la C, porque su contenido en calorías es alto, sin tener en cuenta los cientos de compuestos saludables que contiene el aceite de oliva virgen, como polifenoles, escualeno, etc., cuyo efecto beneficioso para la salud se ha demostrado en ensayos tan reconocidos como PREDIMED.

En la entrevista, el profesor Pérez Jiménez aclara la distinción entre aceite de oliva y aceite de oliva virgen, destaca las propiedades beneficiosas del segundo, y aborda cuestiones relativas a otros productos que también se ven penalizados en Nutriscore, como el jamón serrano y el queso; otros etiquetados que suponen una alternativa a esta herramienta; y si considera que este etiquetado puede ayudar realmente a los consumidores a hacer mejores elecciones para su dieta, entre otros temas.

"No se trata de objetar a Nutriscore, sino de objetar a un sistema de etiquetado frontal que es tan permisivo con ciertos productos, y tan exigente con otros", asegura.

Para conocer en profundidad todas estas cuestiones, haz clic en el vídeo de la entrevista sobre estas líneas.