Las micotoxinas representan un riesgo potencial para la salud humana y animal si se consumen alimentos o piensos elaborados a partir materias primas que las contienen. El número de micotoxinas identificadas hasta ahora supera las 300, pero solo algunas de ellas tienen regulados legalmente sus niveles máximos permitidos en alimentación.
Así, se han establecido niveles máximos para ciertas micotoxinas en harinas de cereales, pero se sabe poco sobre los niveles en harinas en general, y en particular sobre las llamadas micotoxinas emergentes. La evolución de los métodos analíticos ha permitido que podamos detectar dichas micotoxinas emergentes, pero los datos sobre su presencia en alimentos, efectos tóxicos e interacciones aún son escasos, y por tanto no son analizadas rutinariamente y sus niveles permitidos no están legalmente regulados.
En un estudio realizado en el grupo de Química Ambiental del INIA-CSIC, y recientemente publicado en la revista Toxins, se describe un método eficiente, sensible y selectivo para la detección en harinas sin gluten de cuatro micotoxinas emergentes y tres reguladas. En concreto en harinas de avena y arroz, aptas para celiacos.
“Nuestro estudio se ha centrado en este tipo de harinas dada la popularidad que han adquirido en los últimos años los productos sin gluten”, declara Rosa Ana Pérez, investigadora principal del trabajo. “Para ello, hemos puesto a punto un método extractivo adecuado y su análisis cromatográfico y, una vez validado, hemos analizado la presencia de micotoxinas en harinas de avena integral y arroz, tanto convencionales como de cultivo ecológico”, añade la Dra. Pérez.
En estos análisis se detectaron seis de las siete micotoxinas evaluadas, con la presencia simultánea de varias de ellas en las harinas analizadas, particularmente en las de avena integral convencional. En cambio, la harina de arroz mostró una baja frecuencia de detección de estas sustancias. Las micotoxinas emergentes son las que se detectaron en un mayor número de muestras. Así, la eniatina B estuvo presente en el 53 % de las muestras, seguida de la eniatina B1 y la beauvericina, que se detectaron en el 46 % de las muestras. “Estos resultados ponen de manifiesto la necesidad de mejorar el conocimiento sobre la presencia de micotoxinas, especialmente las consideradas emergentes, en harinas sin gluten y productos a base de cereales”, concluye Rosa Ana Pérez.
Este trabajo realizado en el Dpto. de Medio Ambiente y Agronomía del INIA-CSIC está disponible en la revista Toxins en formato de acceso en abierto para facilitar su consulta. Esta investigación ha sido financiada por el programa de investigación e innovación Horizonte 2020 de la Unión Europea bajo el acuerdo de subvención Marie Sklodowska-Curie. FoodTraNet.
Referencia
Giannioti, Z.; Albero, B.; Hernando, M.D.; Bontempo, L.; Pérez, R.A. Determination of Regulated and Emerging Mycotoxins in Organic and Conventional Gluten-Free Flours by LC-MS/MS. Toxins 2023, 15, 155. https://doi.org/10.3390/toxins15020155.