Con el objetivo de mejorar las pesquerías españolas para hacerlas más respetuosas con el medio ambiente, rentables y sostenibles en el tiempo, la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha desarrollado durante nueve meses el proyecto “Evaluación y mejora de las tasas de supervivencia de peces y crustáceos capturados mediante artes de pesca tradicionales en Cádiz (REPESCA)”.
Este proyecto se ha centrado en la evaluación y mejora de la supervivencia en pesquerías tradicionales de Conil (Cádiz), demostrando resultados muy satisfactorios en las especies capturadas por debajo de tallas comercialmente rentables: borriquete, hurta, pargo, breca, vieja y sargo.
En las pesquerías europeas se obliga a desembarcar todas las capturas sometidas a cuotas o tallas mínimas. Esto supone la necesidad de mejorar la selectividad de las artes de pesca para minimizar las capturas incidentales. Sin embargo, Europa permite una exención a dicha obligación para especies cuya supervivencia y recuperación tras la pesca sean científicamente probadas.
Por este motivo, desde la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Complutense de Madrid, bajo la dirección del investigador Ignacio Ruiz-Jarabo del grupo de investigación de Neuroendocrinología de Peces, se puso en marcha REPESCA, con el objetivo de que las bases metodológicas de estas pesquerías puedan ser exportadas a otros artes de pesca y áreas.
Los resultados potenciales contribuyen a minimizar el impacto negativo de la pesca sobre el ecosistema, objetivo detallado en el Artículo 2 del Reglamento (UE) Nº1380/2013 del Parlamento Europeo y del Consejo y que aboga por la protección de la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos.
Para la realización de los ensayos, se instalaron jaulas flotantes en el muelle pesquero de Conil con objeto de mantener a los animales, y así evaluar las respuestas fisiológicas primarias y secundarias de los individuos tras la pesca.
De esta forma, tras las 24 y 48 horas, los supervivientes son pesados y medidos, se toman muestras de sangre y moco dérmico para análisis fisiológicos, y los animales son marcados y liberados al medio para realizar un seguimiento de su supervivencia en el medio natural.
El proyecto, con un presupuesto total de 150.813,18 €, ha contado con la colaboración de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio de Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través del Programa Pleamar, cofinanciado por el FEMP.