Muchos compuestos que se encuentran por naturaleza en la piel de la uva pueden mejorar el sabor y aroma de los vinos. El proceso de maceración usado para la elaboración de vinos tintos asegura que tales componentes se  encuentren disueltos en el vino, ya que el proceso de fermentación se inicia con la presencia de los hollejos en el mosto. Sin embargo, en la elaboración de vinos blancos, los hollejos son separados normalmente de dicho mosto, por lo que no se encuentran en el producto final.
Recientemente, la mayoría de las bodegas han incluido una nueva etapa, llamada “maceración en frío”, en su proceso de elaboración, consistente en  la extracción de los componentes del sabor, aroma y textura (taninos) de  la piel de las uvas antes de su fermentación. Durante el proceso de maceración en frío es muy importante mantener una baja temperatura, con el objetivo final de inhibir la fermentación. Con la intención de poder realizar este proceso  de una manera precisa, rápida y automática, Abelló Linde ha desarrollado el Enofresh, un sistema para el  enfriamiento de la uva en un proceso en continuo, en el circuito que va desde la tolva de recepción hasta la prensa  o tanque de maceración de la bodega.