En Revista Alimentaria 512, para la sección Director de Calidad, hemos contado con Adesa, una asesoría encargada de ayudar a las empresas en su gestión de la calidad y la seguridad alimentaria. Su objetivo es ayudarlas y dar soporte para que el funcionamiento siempre sea correcto y adecuado. Al ser expertos en la materia, facilitan información y puntos necesarios que las propias empresas pueden desconocer y que son necesario para que la gestión de la calidad se realice de forma optima.

En el artículo, Izaskun Agirrezabalaga Beristain, Directora Técnica de Adesa, nos relata cómo es un día en la oficina para ella:

"Son las 9:05h de una mañana de un martes de mayo. Después de haber dejado a mis hijos en el colegio, me doy cuenta de que tengo varias llamadas perdidas de un técnico de Adesa: un cliente importante nuestro, de los de toda la vida, está “sufriendo” una auditoría sorpresa dentro del Integrity Program de IFS. Es la primera que ha recibido el cliente. Nos llaman para saber qué es lo que se espera, por qué les ha tocado a ellos, cuánto va a durar, etc. Les transmitimos calma y seguridad. Por suerte (mejor dicho, por conciencia y por profesionalidad de la dirección de la empresa) es una empresa seria, comprometida con la seguridad alimentaria y que cumple con los requisitos del sistema de gestión en el día a día. ¿Pero eso no lo hacen todos? Bueno, en este sector también hay de todo, como en botica.

La auditoría ha ido bien. Se han detectado algunas incidencias menores, pero se ha superado la auditoría no anunciada sin mayores sobresaltos. El auditor ha quedado satisfecho, con una buena sensación y opinión de la empresa. Ahora a la responsable de calidad de la empresa le toca reubicar los registros y seguir con las tareas acumuladas y no atendidas durante la auditoría, y todo el personal de la empresa (dirección, departamento de calidad, producción, entre otros) y la empresa consultora nos quedamos con la inmensa satisfacción que producen estos momentos que evidencian y ponen de manifiesto la razón de ser de un sistema de gestión de seguridad alimentaria certificado y sobre todo, bien implantado y en continua mejora continua.

Esta situación nos ha permitido crecer, tanto a la empresa auditada, como al técnico de Adesa, como a mí, directora técnica. Hemos pasado de la tensión y nervios iniciales a la satisfacción y el orgullo del trabajo bien hecho y evidenciado, lo que genera una dosis nueva de motivación. Una prueba superada más que incorporamos a nuestra mochila. La siguiente vez que ocurra tendremos ya experiencia y dispondremos de más información para trasladársela al siguiente cliente.

Llamada del gerente de una empresa de alimentación. La responsable de calidad se va en una semana y en menos de 3 meses deben estar certificados en IFS. ¿Lo podemos hacer? Hablo con él y planificamos una auditoría interna para conocer el estado de implantación del sistema de gestión, antes de que se vaya la responsable de calidad para que podamos obtener la información de primera mano.

Ponemos el equipo en marcha para alcanzar el objetivo, llevamos a cabo la auditoría interna, se completa el sistema de gestión, se apoya a la empresa en la implantación del mismo, y en el plazo definido, la empresa obtiene la certificación. No ha sido tarea fácil, hemos tenido que ser muy eficientes, tener las prioridades bien definidas, concienciar a los responsables de lo que puede suponer cada incumplimiento y sobre todo vivirlo, implicarnos en el proyecto y como resultado, más allá de la certificación, ganar relaciones que aportan en lo profesional, pero sobre todo en..."

 

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