Se ha publicado el Decreto 165/2018, de 18 de diciembre, por el que se regulan las condiciones sanitarias de la carne de caza en Andalucía con destino a consumo humano. En él se recuerda que el incremento de la demanda de carne de caza en los últimos años ha supuesto el auge de este sector. Asimismo, se han producido importantes cambios normativos tanto a nivel comunitario como nacional que derogan la legislación anterior y establecen un nuevo marco regulador.

Uno de ellos se refiere a que, si bien toda la carne de caza que se destina a comercialización tras su paso por un establecimiento de manipulación de caza es sometida por los controles oficiales al método de referencia que establece el Reglamento (UE) núm. 2015/1375 de la Comisión, de 10 de agosto (en el que ya no se contempla el método triquinoscópico como método de referencia, al no ofrecer suficientes garantías de diagnóstico), este Reglamento no se aplica a la caza silvestre y sus carnes directamente suministradas a la persona consumidora final, por lo que los Estados Miembros tienen la responsabilidad de adoptar medidas nacionales para reducir el riesgo de que llegue carne de jabalí con triquina.

En consecuencia, se hace necesario proceder a determinar los requisitos para descartar la presencia de triquina en piezas de caza mayor con destino a autoconsumo de manera que tengan unas garantías equivalentes con el resto de carne de caza que se consume procedente de un establecimiento de manipulación de caza, mediente el método que establece el Reglamento (UE) núm. 2015/1375 de la Comisión, de 10 de agosto.